Todos queremos disfrutar las fiestas navideñas, sin embargo, ante una condición se crea el estrés y expectativa de qué hacer si se desea disfrutar de lo típico de tu país. Es importante tener presente que no es saludable consumir alimentos dañinos para la salud y luego contrarrestar con algún medicamento para minimizar su daño.
Para mayor beneficio de un balance alimenticio durante las navidades, es fundamental conocer y controlar la cantidad de hidratos de carbono (carbohidratos) que se toman en cada una de estas comidas. Para ello, es necesario saber cómo se pueden intercambiar los alimentos típicos navideños que se consumen habitualmente, sin tener que modificar la dosis de insulina o de medicación oral. Es importante evitar una alteración en las cifras de glucosa en la sangre.
No es díficil lograr un balance durante las navidades, solo se debe incluir alternativas saludables en la mesa, que complementen las otras opciones típicas y tradicionales de estas fechas.
Estas son alguna sugerencias para estos días:
Menos hidratos de carbono
En general, el contenido total de hidratos de carbono de cada una de las comidas navideñas debería ser similar al de cualquier otra comida del año.
Los postres suelen tener un contenido en azúcar superior a lo normal, por lo que para compensarlo es necesario elegir aperitivos y primeros platos con bajo contenido en hidratos de carbono.
Evita los alimentos fritos, aperitivos prefabricados o bollerias (quesitos, pastelillos, entre otros).
Alimentos sustitutos:
• Verduras: calabaza, batata y pana.
• Ensaladas variadas: lechuga, espinaca, repollo, entre otros, y aderezadas con frutos secos o frutas como dátiles y distintos vinagres.
• Arroz integral o arroz perbolizado.
• Salmón ahumado, pavo, o lomo de cerdo.
• Pavo o lomo relleno de vegetales.
Para continuar: todo más ligero
Para los platos principales puedes preparar alimentos al horno o a la plancha evitando salsas ricas en grasas, especialmente para aquellas personas con sobrepeso. Además, es recomendable moderar las cantidades, evitando servir grandes porciones. Estos platos pueden ir acompañados con ensaladas y verduras, pues incrementan la sensación de saciedad, aportando menos calorías, menos hidratos de carbono y cierta cantidad de fibra vegetal.
Más imaginación y menos azúcar
Para sustituir o complementar los clásicos dulces navideños busca opciones más ligeras que tengan menos hidratos de carbono, y que sean igual de apetecibles. Por ejemplo, frutas digestivas (piña, dátiles, fresas, papaya) o elabora algún postre sin azúcar añadida.
Hidratos de carbono: ni uno más, ni uno menos
Las personas con diabetes pueden participar perfectamente en las comidas y cenas familiares, tomando el mismo menú que los demás. Tan solo hay que intentar no variar la cantidad de hidratos de carbono respecto a su comida habitual, practicando algunos trucos.
Trucos:
• Si la fiesta comienza después de las 6 pm, asegúrate de haber hecho tus comidas anteriores.
• No es necesario consumer el arroz. Puede elegir el pavo o el pernil y acompañarlo de algún vegetal.
• Evite la mesa de los dulces.
• Si la fiesta es desde temprano asegúrece de salir desayunado de su casa.
• Para el almuerzo y cena siga esta estrategia:
• Almuerzo: porción pequeña de arroz (puño de tu mano), una porción de pavo (palma de tu mano) y el resto de ensalada.
• Cena: una porción de pavo (palma de tu mano) y el resto de ensalada.
¡Evita el picoteo!
Es importante siempre seguir las indicaciones de su médico. No incrementar por cuenta propia las dosis de fármacos o insulina ante alguna de las “comelonas” navideñas. Recuerde seguir todos sus tratamientos habituales, incluyendo los controles de glucemia y la toma de otros medicamentos.