Te comparto algunas razones para que celebres:
- Dos tazas de melón (sandía), tienen sólo 80 calorías.
- Es libre de colesterol y grasa.
- Refresca hasta al más acalorado del verano. Un 92% es agua, así que te va a hidratar.
- Su contenido de B6, antioxidantes, potasio y aminoácidos, nos beneficia todavía más, si lo consumimos antes o después de hacer ejercicio.
- Su contenido de vitamina C, fortalece nuestro sistema inmune y nos protege contra gérmenes.
- Si la prefieres en un jugo, llévalas a la licuadora con un poco de agua, hielo y luego decoras con menta.
- Si las prefieres en el desayuno, agrégale queso crema o Greek yogurt y algunas nueces.
- Son el perfecto snack de media mañana.
- En ensalada va perfecta, con diferentes tipos de lechugas, vegetales y un poco de aceite y vinagre balsámico o reducción de balsámico, sabrá deliciosa. Y hasta en una ensalada de quinoa o cubitos cubiertos con jamón cortado muy fino.
- Dale formas divertidas con un cortador de galleta, con eso puedes hacer una tremenda actividad de verano en la cocina con los niños. O que hagan su propia “pizza de melon”, cortando el melon entero en rodajas, que sirvan como la “masa”, la decoran con queso crema o Greek yogurt y luego “berries” y nueces.
Cuando la vayas a comprar, selecciona las que tengan una forma perfecta, sin cortes, ni marcas y deben tener un peso equiparable a su tamaño. Voltéala y busca que tenga una marca grande amarilla que es indicio de que está madura. Lávala bien y sécala antes de cortarla. No es recomendable comprarla la cortada, si una entera es mucho para tí, al menos compra una mitad.
Doreen Colondres es latina, una viajera incansable graduada y certificada en cocina y vinos. Síguela en las redes @Doreen Colondres, visita su web www.LaCocinaNoMuerde.com o adquiere su libro en Amazon.