Son muchas las personas que prestan gran importancia al mantener un cuerpo saludable, pero hay muchas otras que pasan por alto la salud mental. Tener el control de la salud mental puede hacer la vida más agradable, como también promover una mejor salud y resistencia física. Por eso toma tiempo para pensar y actuar inmediatamente si las emociones negativas y estrés te controlan. Toma nota de lo siguiente:
¿Qué debo hacer?
- Lidiar con el estrés. Si estás bajo estrés constantemente, contrólalo haciendo ejercicio. El ejercicio y la actividad física pueden aliviar los músculos tensos. También hace que el cuerpo libere endorfinas que te hacen sentir bien e inhiben la respuesta corporal al estrés. A su vez, mejora el estado de ánimo y te ayuda a sentirte más calmado.
- Comer bien. Los hábitos alimenticios y dietas adecuadas ayudan a reducir el estrés. Por otra parte, limita el consumo de cafeína y alcohol, ya que muchas de estas sustancias promueven la ansiedad. Alimentos que ayudan al cuerpo son: aguacate, té, granos enteros, pescados grasos, zanahoria, frutos secos, yogur, entre otros.
- Dormir lo suficiente. Cuando dormimos, el cuerpo se repara y procesa el estrés del día. El sueño ayuda a evitar graves respuestas al estrés, como la ansiedad. El descanso debe ser de calidad. Al menos duerme de 6 a 8 horas cada noche.
- Meditar. Enfócate en el momento presente y concéntrate en estar en un lugar y no hacer nada más, al menos 30 minutos al día. La conciencia plena disminuye la reactividad emocional, la ansiedad y la depresión. También, esta actividad produce cambios beneficiosos en la conducta y el funcionamiento del cerebro.
- Dedícate tiempo. Una de las cosas que afecta la salud mental es estar tan cargado que no te dediques tiempo para hacer alguna actividad o pasatiempo favorito. Por ejemplo, puedes sacar a la semana tiempo para hablar con un amigo, salir a caminar, escuchar música, ir al cine, entre otras actividades que te ayuden a salir de la cargada rutina.