Nada nos enferma tanto como insistir en amar a alguien que nos hiere. Sin embargo, me atrevería a asegurarles que la mayoría de quienes nos hieren lo hacen sin la intención real o el conocimiento pleno de que nos están hiriendo. Pero ahí están, tomando decisiones, rompiendo pactos, hablando de nosotros a nuestras espaldas. Entonces, ahí estamos nosotros, justificándolos.

Sé libre de las relaciones tóxicas

En mi libro resalto algunos puntos importantes sobre las relaciones saludables y el perdón. El perdón no siempre restaura una relación rota. Quizá se nos hace difícil perdonar una herida fuerte y grande, porque en el fondo sabemos que antes de esa herida existieron muchas otras que pasamos por alto o que perdonamos. Por el contrario, se nos hace fácil perdonar a quienes queremos que permanezcan en nuestra vida. Pero, si tuviéramos que escoger a quiénes perdonar y a quiénes no (sabiendo que lo más saludable sería poder perdonar a todos), ¿cómo podríamos escoger a quiénes vamos a perdonar y conservar en nuestra vida?

La salud emocional es esencial para tu salud física, estabilidad y manejo de tus emociones. He conocido más personas en relaciones tóxicas que la cantidad de personas solteras queriendo tener pareja. Quizá se nos ha enseñado tanto que tenemos que enamorarnos, casarnos y tener hijos, que nos ha movido a conformarnos con “lo que hay” o hasta aceptar relaciones que más que relaciones parecen “situaciones”. La razón principal por la que entramos en relaciones tóxicas es por desconocimiento, porque no hemos aprendido a identificarlas o, en ocasiones, no tenemos el valor de aceptar cuán tóxicas son para nosotros.

Tipos de relaciones tóxicas

La codependencia. Podemos encontrar relaciones que están basadas en mentiras, que les cuesta ser honestos el uno con el otro y prefieren usar las mentiras para evitar ser confortados.

Pasivo agresivas. En las cuales no hay muchas peleas, pero en su conducta pasiva le dejas saber al otro “vas a pagar por lo que me dijiste o me hiciste”. Relaciones donde hay una lucha de poder que puede llevar a la violencia.

Una relación tóxica significa no ser libre. Podrás identificar una relación tóxica cuando te des cuenta que no puedes ser libre de mostrarte de la manera humana que eres y esto te afecta en las demás relaciones que tienes. Te sientes triste, abrumado, cansado, y desconoces por qué te sientes así. Cuando física o emocionalmente te sientes atado, esta es una relación que debes evaluar. El amor es voluntario y no debe ser obligado.